El hígado es un órgano que cumple diversas funciones fundamentales en nuestro organismo, como desintoxicación, lucha contra infecciones, almacenamiento de vitaminas y energía y segregación de bilis, sustancia que aporta a la actividad digestiva. Es fundamental cuidar este órgano, ya que se encarga de liberar de nuestro sistema sustancias tóxicas limpiando la sangre.
Existen varias causas por las cuales el hígado deja de realizar su funcionamiento efectivo y eficaz, y esto se debe en muchas ocasiones por el consumo desmedido de bebidas alcohólicas, por enfermedades o falta de higiene en la ingesta de alimentos.
Por esto, es importante tener en cuenta que el hígado puede sufrir ataques desde elementos externos como desde el mismo sistema inmunológico, convirtiéndose en blanco de infecciones y diversos problemas de salud; de tal manera que es fundamental conocer las señales que indican que su hígado no anda bien.
A continuación, te las presentamos.
SIGNOS QUE EVIDENCIAN EL MAL FUNCIONAMIENTO DEL HÍGADO
Si consume muchos medicamentos o una sobredosis de los mismos está corriendo el riesgo de generar problemas en el funcionamiento normal de su hígado.
Otra señal es el hecho de tomar el mismo medicamento durante largos periodos de tiempo.
El consumo regular de más de 5 bebidas alcohólicas diarias asegura una afección a su hígado.
Herencia familiar de enfermedades hepáticas.
El consumo de medicamentos para el corazón o para la diabetes.
Mala digestión, dolor abdominal, estreñimiento.
Náuseas, sobre todo después del consumo de comidas grasas.
Síndrome de colon irritable.
Mal aliento o lengua con presencia de manchas blancas.
Cambios de humor, depresiones y mala memoria, esto debido a que el mal funcionamiento del hígado no permite la desintoxicación del organismo y estos tóxicos llegan al cerebro por medio de la sangre afectando su funcionamiento.
Fiebre, infecciones cutáneas y asma.
Tensión alta.
Retención de líquidos.
Dolores de cabeza.
Nivel inestable de azúcar en la sangre.
Enfermedades y aparición de cálculos en la vesícula biliar.
Excesiva temperatura corporal.
Baja tolerancia a algunos medicamentos, tales como antibióticos.
Síntomas de una persona con un hígado enfermo
Cambio de color en la piel y en los ojos, adquiriendo una tonalidad amarilla.
Dolor e hinchazón abdominal.
Sensibilidad en la piel (irritabilidad, picazón, inflamación).
Pérdida de apetito, náuseas, fatiga crónica.
Cuando una persona presenta alguna señal o síntoma anteriormente mencionado debe recurrir al médico para una valoración, y debe eliminar de su dieta alimentos como bebidas alcohólicas, gaseosas, clavos, alimentos condimentados, embutidos y alimentos fritos. Debe seguir las medidas alimentarias y los parámetros estipulados por el médico con el fin de evitar cualquier enfermedad que interfiera con el buen funcionamiento de su organismo.
Así mismo, las personas con mayor riesgo de presentar enfermedades del hígado son aquellos que padecen de enfermedades como diabetes, que consumen bebidas alcohólicas, que trabajan con químicos tóxicos o en laboratorios en los cuales manipulan sangre, virus o bacterias, personas con obesidad o con tatuajes (esto debido al uso de agujas no esterilizadas).
Es responsabilidad de cada uno la salud personal, es por ello que es importante escuchar los avisos y alertas que brinda el cuerpo. Debe comer si tiene apetito, de lo contrario, no debe obligar al cuerpo a recibir comida, en vez de esto, puede nutrirlo con un jugo natural, una fruta o un vaso con agua. Si obliga a su cuerpo a recibir alimento sin necesitarlo hace que e hígado trabaje en exceso y corra el riesgo de enfermarse.
Es aconsejable beber agua mineral en una cantidad de 8 a 12 vasos diarios, ya que ofrece el beneficio de desintoxicar el hígado y limpiar los riñones. Debe evitar consumir grandes cantidades de azúcar, ya que el hígado se encarga de convertirlo en grasa y colesterol, afectando el buen funcionamiento de su organismo.
Si desea tener un hígado saludable evite en toda medida consumir endulzantes artificiales, el cuerpo siempre exige un nivel de azúcar, pero este puede ser suplido por el consumo de frutas frescas, miel o, en caso tal, endulzantes naturales como la estevia.
Por último, para no exponer al hígado a infecciones y un trabajo excesivo y acelerado, debe procurar una buena higiene en el momento de la preparación e ingesta de los alimentos y aumentar el consumo de legumbres y verduras, evitando los alimentos con pesticidas o químicos.
Super interesante el post!!!