El síndrome del hijo custodio en el árbol genealógico familiar.

Es una expresión para hacer referencia a las personas que cargan los conflictos que no se pudieron superar, lo que no se hizo y se tendría que haber hecho,  los secretos de la familia.

Son personas que no viven su propia vida, como lo hacen los demás, sino que asumen responsabilidades muy concretas que muchas veces les impiden casarse, tener hijos o formar familia, porque su misión es que deben estar disponibles para cuidar a los demas.

Esta es la historia de María, una hija que tiene el síndrome del hijo custodio en el árbol genealógico.

presta atención porque quizá está información resuene con algo que está pasando en tu vida y que todavía no has tomado conciencia y si te detienes a observar empezarás a encontrar información valiosa que te puede ayudar a comprenderte un poco más tus comportamientos.

María, viene a consulta porque quiere entender los nuevos acontecimientos que han aparecido en su vida, que ella creía que ya estaban resueltos, pues ella es consciente de que existen programas inconscientes transgeneracionales, cuya información ha venido pasando de generación en generación y que la lleva a tomar decisiones poco favorables para ella.

Asimismo, es consciente, que todo lo que su madre vivió, mientras ella se gestaba en su vientre, la ha influenciado en su forma de ver la vida; así como su experiencia vivida a su corta edad, que fue el temprano fallecimiento de su hermano mayor y que todo este bagaje de información que hay dentro de ella, ha hecho que tome decisiones en su vida de una forma determinada.

Para empezar, su terapeuta le sugiere que revise una información sobre la fidelidad a los fallecidos y al entrar en contacto con esta información, siente que resuena con ella y con mucho cuidado analiza sus características y cuando descubre una característica que guarda relación con su experiencia vivida que fueron dos abortos voluntarios consecutivos, decisiones que tomó en forma automática, ella aprecia que había traído el dolor de los muertos a su vida y este hecho encajaba en esta clasificación.

Al darse cuenta de ello, lo primero que hizo fue buscar el significado del síndrome del hijo custodio en el árbol genealógico y encuentra que es cuidar, cuando encuentra este sinónimo, se da cuenta que este programa inconsciente ya lo conocía, pues cuando estaba en el vientre de su madre su hermano mayor padecía una enfermedad muy grave y fallece cuando ella tenía un año y medio, por lo que, su madre durante la enfermedad de su hermano, lo cuidaba a él esperando que se sanara y ella desde el vientre de su madre fue tomando toda esta información.

Cuando María revisa la historia de su madre descubre que cuando ella era pequeña, su hermano primogénito (Tío de maría) había fallecido de una afección de un virus que en ese tiempo no tenía cura.

Curiosamente la historia se había repetido en su generación y María recuerda que cuando era niña le gustaba jugar a cuidar a sus muñecas y ponerle inyecciones para que estas se sanaran, que era el mismo pensamiento de su madre para con su hermano mayor.

Toda esta información es transmitida cuando ella estaba en el vientre de su madre y que también debió de haber sido el mismo patrón de pensamiento de su abuela materna cuando estaba gestando a su madre.

Asimismo, ella recuerda que cuando era niña, cinco años aproximadamente su padre le pide llorando que cuidara de ellos cuando fueran ancianos, porque no había quien se hiciera cargo y que sacara adelante a la familia, ella al escuchar esto de su padre.

Toma el mandato y lo guarda profundamente en su memoria emocional y asume esta responsabilidad desviviéndose por ellos y renunciando a su propia vida.

María, recuerda que en su etapa preuniversitaria vivía en una pensión y siempre estaba presta a cuidar a quien se enfermara y cuando su tío sacerdote regresa del extranjero le pide que se haga cargo de él, ella está feliz porque le confiaron una vida en sus manos, y se dedica a cuidarlo y para que su tío no esté solo, trae a sus padres para que le hagan compañía y de esa manera se pone a cuidar de los tres, es decir, se puso a cuidar ancianos, tal como su padre le pidió cuando era niña, pero ella no es consciente de esto y lo confunde como amor.

Luego, como estaba sola piensa que sería bueno tener una pareja para que le ayude a cuidar a su tío y padres, porque ya estaban muy ancianos, no piensa en ella solo piensa en cumplir bien el mandato familiar.

Entonces conoce a Javier y se casa, pero su pareja era bohemio y no se daba cuenta que cuando el regresaba tomado, ella lo tenía que cuidar a él también y cuando se dio cuenta de todo esto y que el cambio de él no dependía de ella, se divorcia.

Primero falleció su tío, luego su madre y al final su padre cuando ya había enterrado a su padre pensó que ya había terminado con su rol de cuidadora, se queda sola en su casa y entonces empiezan a llegar los sobrinos para cuidarlos mientras se preparan para la universidad y se da cuenta que pasó de cuidar ancianos a cuidar jóvenes.

Ya cansada de esto decide parar con el rol de cuidadora, entonces le dice a sus sobrinos que no puede hacerse cargo, que es mejor que regresen con sus padres uno se va de su casa, el otro sobrino se queda y le da pensión, su secretaria se encarga de todo y ella empieza a viajar, hace nuevas amistades, ella les comenta a ellos que se había dedicado a cuidar a sus padres y ahora sin darse cuenta los apoya en cuidar a su mamá en un lugar distinto a su residencia y con el tiempo se da cuenta de que ellos también la veían como un potencial para cuidar personas.

Entonces cuando se da cuenta de esto, ella se pregunta ¿Qué pasa?, era como que llevara en la frente un letrero invisible de CUIDADORA. 

Sin darse cuenta ella tiene, el síndrome del hijo custodio en el árbol genealógico familiar.

Ella decide cambiar todo esto, hace una terapia y se da cuenta que tenía el programa de hija bastón de vejez por mandato de sus padres por lo que hace un acto Psicomágico para salir de este programa inconsciente, pero, ahora al revisar el programa de custodio que es igual al de cuidar, empieza a observarse, a sí misma, para encontrar qué otras cosas más está cuidando y se da cuenta que pasó de cuidar personas a cuidar cosas.

Porque se puso a cuidar su casa porque no hay quien se quede en ella, ¿pues el otro sobrino también regresó a su casa y ella ya no puede viajar y se pregunta para quién estoy cuidando mi casa? y recuerda cuando obtuvo la herencia de su tío, sus tíos maternos le dijeron a su ex esposo que la herencia no era para ellos, sino para los demás hermanos de su finado tío; es decir, en otros términos, era solo para custodiar su herencia y que los beneficiarios iban a ser otros.

Asimismo, observa que cuando se fueron sus sobrinos le han dejado sus cosas y que ella lo tiene que cuidar. De igual manera, una prima por la cuarentena tuvo que dejar la habitación que alquilaba y le pidió que le haga un espacio para que le guarde sus cosas; es decir ahora se quedó cuidando estas cosas.

Al observar otros ámbitos de su vida se da cuenta que su inquilino no le entrega su departamento, porque tiene sus cosas que no tiene donde llevarlo, por lo que ella está cuidando cosas de terceros, es decir está llevando con la carga de su inquilino.

De igual manera ampliando su observación se da cuenta que también está rodeada de familiares y amistades que también son custodios, su ex esposo que le ayudó a cargar con su tío y padres, su amigo Mario de 63 años, soltero, quien hereda tierras de sus padres, pero no los toma para sí, sino que todo lo hace pensando en la siguiente generación, de igual manera su tía Irma, quien custodia sus terrenos en provincia, su amiga Irma que labora en el Juzgado, su compañero de trabajo le dejó toda la carga de hacerlo a ella, mientras él leía un expediente.

El programa inconsciente del síndrome del hijo custodio en el árbol genealógico, se encarga de cuidar al otro o lo que es de otros, en el fondo es cargar con las responsabilidades de los otros; es decir llevas la carga de tus ancestros, luego llevas las cargas de tu familia, posteriormente cargas con la carga de las personas con las que te relacionas, con los cuales tienes contrato, pero cuando detectas el rol inconsciente de custodio y trabajas en ello, lo liberas de tu inconsciente de una manera armoniosa y entonces todo empieza a ordenarse y a cambiar.

Y como se dice “Cuando el observador observa, lo observado cambia” y el inquilino de María la llama para hacerle entrega de su departamento. sin necesidad de que ella recurra al Poder Judicial y así dejó de llevar esta carga que no le correspondía, pero que inconscientemente lo había cargado, por tener el programa inconsciente de custodio que había dentro de ella, es un programa muy profundo y difícilmente somos conscientes de ello.

Muchas veces vivimos en un automatismo como un robot sin ser conscientes de lo que hacemos y porque o para que lo hacemos.

Cuando exploramos nuestra historia familiar tomamos conciencia de patrones de limitación y con esta información sencillamente podemos abandonar roles o mandatos insanos y desbloquear nuestra vida para vivir más saludablemente.